El ingreso al domicilio fue por una ventana del frente y sin ejercer ninguna violencia le sustrajeron la suma de $1.500 que se encontraba en el bolsillo de una campera del dormitorio. En el interior de la vivienda revolvieron buscando algunos elementos para llevarse y aunque habían preparado una bolsa con algunas cosas más (una notebook en otras), las dejaron preparadas, por lo que se presume que fueron sorprendidos por el regreso de la mujer a los pocos minutos.
La policía no descarta que el ladrón o los ladrones hayan estado observando la salida de la dueña de casa. Se sigue investigando el hecho para dar con el responsable.
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