
El funcionario ratificó además que el establecimiento de donde salieron los chacinados está radicado en Villa Eloísa y que por disposición provincial "fue clausurado luego de que pruebas de laboratorio sobre decomisos hechos allí dieran positivo con relación a la presencia de la triquina".
"En El Trébol hay más de 100 casos, en Las Rosas estamos en los 45, en Las Parejas unos 20 y otros tantos en Armstrong, todos por consumo de salame y bondiola. Es una fábrica que faena unos 20 porcinos semanales, unos 500 kilos aproximadamente. Creemos que en estos días van a aparecer los últimos", confió Mirabelli.
El caso comenzó a ser investigado luego de que uno de los damnificados radicara una denuncia en la comisaría 4ª de El Trébol. Es que fue precisamente en esta ciudad de 11 mil habitantes donde se presentaron los primeros enfermos.
Mirabelli direccionó la crítica hacia la fábrica de chacinados, pero también responsabilizó a quienes consumen "productos no autorizados". No ahorró críticas hacia "los endebles controles que aplican las comunas y municipios".
Los dueños de la firma supuestamente se habrían abastecido de cerdos provenientes de criaderos clandestinos y que no pasaron por frigoríficos o mataderos autorizados.
"Lamentablemente suelen tentarse e la compra de animales más baratos y no se miden las consecuencias", señaló Mirabelli.
Difusión de la marca. El mayor porcentaje de los enfermos ya han sido tratados. De todos modos en todas estas localidades se dispuso una amplia difusión de la marca de los productos (Mi Tía) para evitar que la enfermedad se propague.
"Los últimos casos se presentaron este fin de semana. Al ser detectada la empresa y al cortarse la cadena comercial entendemos que no se presentarán nuevos casos", opinó ayer a este diario el director del Hospital de Las Rosas, Alejandro Montagne.
El médico señaló, además, que solamente en Las Rosas "hay 40 casos de triquinosis confirmados", y añadió que "los enfermos son muchos más debido a que hay pacientes que presentan la sintomatología leve y no concurren a los centros asistenciales públicos o privados".
Fuente: Walter Gasparetti
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