OTRA HISTORIA VENIDA DE LOS BARCOS....

La historia de los Niboldi es, según se lo vea, una historia bastante común. Para los argentinos, por caso, no es nada novedoso el encuentro entre italianos o españoles y sus familiares nacidos y afincados por aquí... Pero esta historia nos resulta particularmente emocionante.

Tal vez por la proximidad con la parte argentina –santafesina y parejense- y el hecho menos usual de que fueron “ellos”, los europeos, los que buscaran el encuentro.
Giovanni, 79 años, agradece a su hijo Roberto "por haber dado el primer paso para este encuentro, con aquella carta de marzo último y a Internet”.
La historia arranca como tantas, mezclada con la primera guerra mundial y la diáspora de europeos que huían de ella, recalando en países como los nuestros. Su padre y un hermano llegaron a argentina; uno se quedó acá y el otro eligió el regreso.
Desde entonces, nada, ni un contacto…
Roberto, uno de los millones de afectados por esta crisis financiera internacional, con el tiempo necesario para hacerlo, se puso a trabajar para restablecer, si pudiera, ese vínculo que tanto vio añorar a su padre.
Lo demás contó con la misma intención de este lado del mundo por parte de Héctor, hijo de Francisco, primo de Giovanni.
Se confirmó el parentesco y el resto fue lo imaginable: “para allá vamos”, dijeron los tanos y aquí están sin poder creerlo.
Francisco, Luis, Giovanni y Juanita, primos, en las postrimerías de sus vidas se miran sin salir del asombro.
La vida, después de todo, fue generosa con ellos. Ahí están disfrutándose amorosamente.

LB